La revolución de la inteligencia artificial en la música

We Live Progress

La inteligencia artificial está transformando el panorama musical convirtiendo a los oyentes en creadores y suscitando nuevos debates sobre la creatividad, los derechos de autor y el futuro del sonido.

13 Nov 2024
 • 
,
5 min. read

Los algoritmos de Inteligencia Artificial (IA) y Machine Learning (ML) son capaces de escribir y enviar mensajes que responden a tus consultas sobre productos online, sugerirte qué películas te pueden gustar en función de tu historial, resumir un informe de 100 páginas en dos párrafos e incluso recordarte el cumpleaños de tu madre. Hemos llegado a un punto en el que todos nos preguntamos qué no puede hacer la IA

Ya hemos analizado los pros y los contras de la IA en el lugar de trabajo, pero ¿y fuera del lugar de trabajo y en nuestra vida personal? Más específicamente, ¿en nuestra relación con la música? Ahora, la IA no solo está cambiando la forma en que la escuchamos, sino que también tiene el poder de convertir tu afición por el beatboxing en un viral de TikTok.

¿Puede la IA convertirme en una maravilla musical?

Imagina que escuchas música y sabes cómo te gustaría que sonaran tus canciones, pero cada vez que coges una guitarra e intentas rasguear unos acordes que crees que encajarían, te llevas una gran decepción.

No temas. Las herramientas en línea basadas en algoritmos de inteligencia artificial pueden analizar amplios conjuntos de datos musicales, extraer patrones y generar melodías de géneros y estilos para crear una canción completamente nueva con un talento musical mínimo (o nulo). Incluso puedes imitar los sonidos de tus artistas favoritos con sólo pulsar un botón.

Esta capacidad de edición puede ir incluso más allá, como demostraron los Beatles en noviembre de 2023. Lanzaron su último single, Now and Then, que incluía voces del fallecido John Lennon. No, estas voces no eran fantasmales acechanzas de la tumba; estas voces fueron extraídas de grabaciones de mala calidad realizadas en una demo de 1978. Ni que decir tiene que los fans de The Beatles se alegraron mucho con esta nueva edición.

Pero, ¿en qué situación nos deja esto la posibilidad de que personas y organizaciones accedan a las obras de otros y las reproduzcan (sin su permiso)?

Por ejemplo, el éxito de 2023 “Heart on My Sleeve“, fue creado por el usuario de TikTok ghostwriter977, que utilizó voces generadas por IA imitando a los famosos artistas Drake y The Weeknd. Se hizo viral e incluso se presentó a los premios “Mejor Canción de Rap y Canción del Año” en los Grammy. Esto inició toda una nueva cadena de asuntos, con Universal Music Group NV, la discográfica a la que pertenecen tanto The Weeknd como Drake, enviando una carta a las plataformas de streaming pidiéndoles que bloquearan a los desarrolladores que utilizaran el catálogo de la discográfica para entrenar la tecnología de IA.

Las disputas por los derechos de autor siempre han sido un problema en la música, independientemente de si se han utilizado herramientas de IA o no. Por ejemplo, Led Zeppelin fue acusado por la banda de rock estadounidense Spirit de robar sus instrumentales para la canción “Stairway to Heaven”. Y Ed Sheeran también fue acusado de copiar la melodía de “Let’s get it on” de Marvin Gaye en su canción “Thinking out loud”.

La lista de casos de derechos de autor musicales es exhaustiva, pero demuestra que el robo de música existe desde mucho antes que la IA. ¿Existe ya la creación orgánica?

Regeneración musical

La IA es una herramienta poderosa que, si se sabe utilizar, puede hacer maravillas. Incluso las herramientas de IA más sencillas son capaces de abstraer distintas secuencias de música de una pista y editarlas ligeramente para conseguir el tono, acorde o estilo que buscas (hola, autotune).

Mientras que los “autotunes” del pasado parecían abarcar ese sonido metálico y obvio de la interferencia técnica, la IA moderna consigue editar, barajar, eliminar o “mejorar” hasta la más mínima nota o sonido a la perfección. Así, si has utilizado tu destreza musical para escribir y grabar tu propia canción, puedes corregir tus voces con la IA. O incluso utilizar la IA para cambiar por completo tu producción a lo que la “IA” cree que suena mejor.

Una vez más, esto democratiza la industria musical, permitiendo que aquellos con menos talento y compromiso suenen como profesionales. Todo es diversión y juegos hasta que los que se ganan la vida con la creación y producción musical se ven inundados por las melodías de IA creadas por el ciudadano de a pie.

¿Cómo influye la IA en lo que escucho?

Los servicios de streaming como Spotify y Apple Music se basan en la IA para sugerir canciones en función de los hábitos de escucha de sus usuarios. Estos algoritmos agrupan y recomiendan canciones en función de varios atributos, como el género, el artista, la década, etc. Para los que queremos descubrir nuevos artistas, esto es una bendición. Pero, ¿podría significar que toda la música que te descargues suene igual que esa canción de Kylie que “no puedes sacarte de la cabeza”? Tal vez. ¿Es negativo? Tú decides.

El tira y afloja entre la protección de los artistas, la exploración de la creatividad y la definición del papel del hombre frente a la máquina en la música continuará. ¿Lo único que la IA no puede reproducir? Los sentimientos, la empatía y las emociones reales. Nadie siente la angustia, la pérdida, la alegría y el amor como un ser humano. Así que tal vez deberíamos mantener la IA donde debe estar… automatizando y eliminando las tediosas tareas manuales que nos impiden a los humanos dedicar más tiempo a lo que importa: la auténtica conexión humana y la creatividad en la música… y más allá.